Texto completo. El Santo Padre destaca que la familia numerosa es una escuela de solidaridad y de convivencia. La presencia de estas familias es una esperanza para la sociedad
Por Redacción
CIUDAD DEL VATICANO, 28 de diciembre de 2014 (Zenit.org) - El papa Francisco se ha reunido este domingo con miles de familias europeas, que han querido celebrar con el Pontífice argentino la fiesta de la Sagrada Familia, en el Aula Pablo VI. En un clima acogedor y alegre, el encuentro con el Santo Padre ha tenido lugar con motivo del décimo aniversario de la Asociación de Familias Numerosas de Italia.
Después de escuchar a dos matrimonios, uno joven y otro más mayor, el Papa se ha dirigido a los niños para preguntarles: "¿A qué hora os habéis levantado hoy? ¿A las 6? ¿A las 5? ¿Y no tenéis sueño?". Con una enorme sonrisa, Francisco ha enseñado a los presentes los cuatro folios que llevaba preparados y ha dicho: «¡Pues con este discurso os haré dormir!». La broma ha desatado las risas y los aplausos de todos.
Durante su intervención, el Pontífice ha recordado que "cada uno de vuestros hijos es una criatura única, que no se repetirá jamás en la historia de la humanidad. ¡Cuando se comprende esto, es decir que cada uno ha sido querido por Dios, uno se sorprende ante el gran milagro que es un hijo! ¡Un hijo cambia la vida! Todos hemos visto --hombres, mujeres-- que, cuando llega un hijo, cambia la vida, es otra cosa. Un hijo es un milagro que cambia la vida".
"Vosotros, niños y niñas, sois precisamente eso: cada uno de vosotros es un fruto único del amor, venís del amor y crecéis en el amor. ¡Sois únicos, pero no estáis solos! Y el hecho de tener hermanos y hermanas os hace bien", ha añadido.
El Santo Padre ha proseguido su discurso explicando que "los hijos y las hijas de una familia numerosa son más capaces de la comunión fraterna desde la primera infancia. En un mundo marcado a menudo por el egoísmo, la familia numerosa es una escuela de solidaridad y de convivencia; y estas actitudes luego van en beneficio de toda la sociedad". "La presencia de las familias numerosas es una esperanza para la sociedad", ha subrayado.
En un homenaje a las personas mayores, que también eran muy numerosas, ha señalado que los abuelos no solo proporcionan "ayuda práctica", sino también "apoyo educativo". Así, ha enfatizado que "los abuelos conservan los valores de un pueblo, de una familia, y ayudan a los padres a transmitirlos a los hijos". "En el siglo pasado, en muchos países de Europa, han sido los abuelos los que han transmitido la fe", ha insistido.
Por último, el papa Francisco se ha referido con preocupación a "las familias afectadas por la crisis económica, en las que el padre o la madre han perdido el trabajo, y donde los hijos no lo encuentran". Tras subrayar las dificultades que afrontan las familias, ha deseado que las instituciones públicas y la política les dediquen mayor atención y apoyo. Y ha finalizado sus palabras realizando una petición: "Por favor, seguid rezando por mí, que soy un poco como el abuelo de todos".