29 de diciembre de 2018

Domingo 30 de diciembre de 2018. SAGRADA FAMILIA C.

HOJA PARROQUIAL

Parroquia de Sant Francesc de Borja
Email de la parroquia: sfb500@gmail.com
              Queridos hermanos:
El misterio de la Navidad está lleno de perfume a familia.  (Cf. Francisco. Amoris Laetitiae 65). El secreto de la Familia de Nazaret es que tiene en medio a Jesús, el Hijo de Dios encarnado. Necesitamos sumergirnos en el misterio del nacimiento de Jesús en el seno de un matrimonio especial: el misterio de la acogida de María al Verbo Encarnado con su “hágase”, el misterio de la obediencia y cuidado de José acogiendo a María y al Niño. “La encarnación del Verbo en una familia humana, en Nazaret, conmueve con su novedad la historia del mundo.” (Idem, 65)
La Familia cristiana, que lleva en medio de su debilidad al Hijo de Dios, por su oración, por su escucha de la Palabra de Dios, por la celebración de la Eucaristía dominical, por la caridad, sigue siendo para el mundo un SIGNO que conmueve a quien no está vacunado por la ideología o cegado por la idolatría. “cada familia, a pesar de su debilidad, puede llegar a ser una luz en la oscuridad del mundo” (Idem, 66).
La Sagrada Familia vive una Alianza de amor y fidelidad. (Idem, 66). Lleva esta Alianza consigo. Esta alianza es la que les mantiene unidos, perseverantes, peregrinos, sin instalarse.
Esta Alianza se renueva en cada Eucaristía para la familia. La Eucaristía es la Alianza Nueva y Eterna. Esta Alianza es lo que necesitan los esposos, los hijos, los padres. Alianza que nada puede romper, Alianza sellada en su cruz y resurrección, Alianza que habla de un amor fiel de Dios, Alianza actualizada por el Espíritu Santo en cada Sacramento, sobre todo el de la Eucaristía: “El Espíritu que infunde el Señor renueva el corazón y hace al hombre y a la mujer capaces de amarse como Cristo nos amó.” (Idem, 120). Alianza que consolida el vínculo y que nos hace capaces de amar con un amor renovado y para siempre.
Alianza que lleva a que los esposos mantengan su fidelidad “cuando su cónyuge se ha vuelto físicamente desagradable, o cuando no satisface las propias necesidades, a pesar de que muchas ofertas inviten a la infidelidad o al abandono... dándose mutuamente el sí quiero hasta la muerte” (cf. Idem, 162). Alianza que se va haciendo añeja por “la fidelidad de la espera y de la paciencia. Esa fidelidad llena de sacrificios y de gozos” que va como floreciendo en la edad. (cf. Idem, 231).
Esa alianza Nueva hace que los años no deterioren la relación, o quede en la mediocridad y que, hasta en las crisis encuentra un estímulo para superar obstáculos y un tiempo de paciencia para llegar a beber juntos el mejor vino. (cf. Idem, 232).
El mejor regalo para una Familia es que redescubra y celebre la Eucaristía, la Alianza Nueva y Eterna.
Jesús, vuestro párroco
+ Lectura del santo Evangelio según san Lucas.              2, 41-52

Los padres de Jesús solían ir cada año a Jerusalén por la fiesta de la Pascua.
Cuando cumplió doce años, subieron a la fiesta según la costumbre y, cuando terminó, se volvieron; pero el niño Jesús se quedó en Jerusalén, sin que lo supieran sus padres.
Estos, creyendo que estaba en la caravana, anduvieron el camino de un día y se pusieron a buscarlo entre los parientes y conocidos; al no encontrarlo, se volvieron a Jerusalén buscándolo.
Y sucedió que, a los tres días, lo encontraron en el templo, sentado en medio de los maestros, escuchándolos y haciéndoles preguntas. Todos los que le oían quedaban asombrados de su talento y de las respuestas que daba.
Al verlo, se quedaron atónitos, y le dijo su madre:
«Hijo, ¿por qué nos has tratado así? Tu padre y yo te buscábamos angustiados».
Él les contestó:
«¿Por qué me buscabais? ¿No sabíais que yo debía estar en las cosas de mi Padre?».
Pero ellos no comprendieron lo que les dijo.
Él bajó con ellos y fue a Nazaret y estaba sujeto a ellos.
Su madre conservaba todo esto en su corazón.
Y Jesús iba creciendo en sabiduría, en estatura y en gracia ante Dios y ante los hombres.
Palabra del Señor.
LA FAMILIA CRISTIANA

1655         Cristo quiso nacer y crecer en el seno de la Sagrada Familia de José y de María. La Iglesia no es otra cosa que la "familia de Dios". Desde sus orígenes, el núcleo de la Iglesia estaba a menudo constituido por los que, "con toda su casa", habían llegado a ser creyentes (cf Hch 18,8). Cuando se convertían deseaban también que se salvase "toda su casa" (cf Hch 16,31 y 11,14). Estas familias convertidas eran islotes de vida cristiana en un mundo no creyente.

1656         En nuestros días, en un mundo frecuentemente extraño e incluso hostil a la fe, las familias creyentes tienen una importancia primordial en cuanto faros de una fe viva e irradiadora. Por eso el Concilio Vaticano II llama a la familia, con una antigua expresión, "Ecclesia domestica" (LG 11; cf. FC 21). En el seno de la familia, "los padres han de ser para sus hijos los primeros anunciadores de la fe con su palabra y con su ejemplo, y han de fomentar la vocación personal de cada uno y, con especial cuidado, la vocación a la vida consagrada" (LG 11).
EL EVANGELIO COMENTADO POR EL PAPA

“El Evangelio de hoy invita a las familias a acoger la luz de esperanza que proviene de la casa de Nazaret, en la cual se ha desarrollado en la alegría la infancia de Jesús, quien —dice san Lucas— «iba creciendo en sabiduría, en estatura y en gracia ante Dios y ante los hombres» (2, 52). El núcleo familiar de Jesús, María y José es para todo creyente, y en especial para las familias, una auténtica escuela del Evangelio. Aquí admiramos el cumplimiento del plan divino de hacer de la familia una especial comunidad de vida y amor. Aquí aprendemos que todo núcleo familiar cristiano está llamado a ser «iglesia doméstica», para hacer resplandecer las virtudes evangélicas y llegar a ser fermento de bien en la sociedad. Los rasgos típicos de la Sagrada Familia son: recogimiento y oración, mutua comprensión y respeto, espíritu de sacrificio, trabajo y solidaridad.
Del ejemplo y del testimonio de la Sagrada Familia, cada familia puede extraer indicaciones preciosas para el estilo y las opciones de vida, y puede sacar fuerza y sabiduría para el camino de cada día.
La Virgen y san José enseñan a acoger a los hijos como don de Dios, a generarlos y educarlos cooperando de forma maravillosa con la obra del Creador y donando al mundo, en cada niño, una sonrisa nueva. Es en la familia unida donde los hijos alcanzan la madurez de su existencia, viviendo la experiencia significativa y eficaz del amor gratuito, de la ternura, del respeto recíproco, de la comprensión mutua, del perdón y de la alegría.
Quisiera detenerme sobre todo en la alegría. La verdadera alegría que se experimenta en la familia no es algo casual y fortuito. Es una alegría que es fruto de la armonía profunda entre las personas, que hace gustar la belleza de estar juntos, de sostenernos mutuamente en el camino de la vida. Pero en la base de la alegría está siempre la presencia de Dios, su amor acogedor, misericordioso y paciente hacia todos.
Si no se abre la puerta de la familia a la presencia de Dios y a su amor, la familia pierde la armonía, prevalecen los individualismos y se apaga la alegría. En cambio, la familia que vive la alegría, la alegría de la vida, la alegría de la fe, la comunica espontáneamente, es sal de la tierra y luz del mundo, es levadura para toda la sociedad.
Que Jesús, María y José bendigan y protejan a todas las familias del mundo, para que en ellas reinen la serenidad y la alegría, la justicia y la paz, que ha traído Cristo al nacer como don para la humanidad.” (Francisco. 27.12.2015)
El Niño Jesús

Señor Jesús, colocado en medio de la montaña escarpada, en el medio de la Cueva oscura, en un pesebre, como LUZ DEL MUNDO y PAN DE LA VIDA.
Señor Jesús, que en medio de nuestra oscuridad, de nuestra tiniebla, de nuestras preocupaciones, de nuestras dificultades, de “la crisis” y de cada una de nuestras crisis personales… BRILLA “LA LUZ” de la fe, de la esperanza y de la caridad que enciendes en nuestros corazones.
Tú has venido como el Sol, que ha salido de su alcoba, contento como un héroe, el Sol que nace de lo alto, para iluminar a los que viven en tinieblas y en sombras de muerte.”
Señor Jesús, que has realizado con nosotros un admirable intercambio: te has hecho hombre para que nosotros podamos participar de tu divinidad; has venido a las tinieblas y sombras de muerte para que fuéramos iluminados por Ti. Tú, el Eterno, engendrado por el Padre desde toda la Eternidad, te has hecho mortal, siendo generado en el tiempo por medio de la Virgen María.

Tú, el que es, el Mesías, el Cristo, el Ungido, el que estás con nosotros todos los días de nuestra vida, te has hecho PAN DE VIDA. Depositado en un pesebre y nacido en Beth-lehem, en la Casa del Pan, te conviertes en alimento de los que te reconocen, como la mula o el buey.
Tú, recostado en el pesebre, envuelto en pañales, nos recuerdas que también yacerás recostado en el sepulcro, envuelto en lienzos, lienzos que serán abandonados tras tu resurrección. Con tu nacimiento has asumido tu muerte en cruz, muerte que viene a rescatarnos del pecado y del miedo a la muerte y hacernos participar de tu misma vida por la fe y la confianza. Recostado en un pesebre, recostado en el sepulcro y recostado en el altar, cada Eucaristía nos hace presente este misterio de nuestra salvación.
Señor Jesús, adéntranos en este misterio, escondámonos juntos en la cueva de tu Luz, de tu amor al Padre, y salgamos juntos a llevar esta Luz a tantos pobres, mendigos de amor que vagan sin sentido, a tantas familias que viven desunidas o tienen por normal el odio o la indiferencia.
1. Tienen a su disposición el Evangelio 2019, y el Calendario 2019, tanto de mesa como de pared. Ayúdenos a difundirlo.
concurso de dibujo-pintura,
redacción y poesía
Bajo el lema: “Busco posada”.
Entrega de un detalle a cada participante:
el domingo 30 de diciembre en la misa de 11.30 h.
Entrega de premios de los ganadores: el 5 de enero a las 20.30 h., coincidiendo con la presencia de SSMM los Reyes de Oriente.

Del 31 de diciembre al 6 de enero  de 2019

Lunes 31. Por la mañana : San Silvestre I, Papa.
Por la tarde: SOLEMNIDAD DE SANTA MARÍA MADRE DE DIOS.
18.00 h.: Con niños. Sin intención. 19.30 h.: En sufragio de: Salvador Escrivá; José Antonio Puchades.
Martes 1. SOLEMNIDAD DE SANTA MARÍA MADRE DE DIOS.
10.00 h.: Sin intención. 11.30 h.: Pro Pópulo. 19.30 h.: Sin intención.
Miércoles 2. San Basilio el Grande y San Gregorio Nacianceno, obispos y doctores. 19.30 h.: En sufragio de: Dif. Fam. Ferrer-Puig. 
Jueves 3. Santísimo Nombre de Jesús. 19.30 h.: Sin intención. 
Viernes 4. 19.30 h.: Sin intención.
Sábado 5. Por la tarde: SOLEMNIDAD DE LA EPIFANÍA DEL SEÑOR.
18.00 h.: Con niños. Sin intención. 19.30 h.: En sufragio de: Dif. Fam. Escrivá-Morant.
20.30 h. Llegada de SS.MM los Reyes de Oriente.
Domingo 6. SOLEMNIDAD DE LA EPIFANÍA DEL SEÑOR.
10.00 h.: Sin intención. 11.30 h.: Pro Pópulo. 19.30 h.: Sin intención.
A lo largo del año, en todas las misas, se reza por todos los difuntos. Algunas celebraciones incluyen una intención particular por algún difunto o por alguna necesidad. En muchas de las ocasiones se acompaña de una ofrenda para el sacerdote llamada estipendio. Les invitamos a solicitar en el despacho la celebración de intenciones particulares o misas en sufragio.
-----------------------------------------------------
Puedes descargar la Hoja Parroquial:







No hay comentarios: